In Dublin's fair city,
Where the Girls are so pretty,
I first set my eyes,
On sweet Molly Malone,
As she wheeled her wheel barrow,
Through the streets broad and narrow,
Crying cockles and mussels,
Alive alive o!
Así comienza «Cockles & Mussels«, la canción dedicada a Molly Malone que se ha convertido en todo un himno de Dublín. Con sus acordes de fondo, me gustaría resumir en este post qué hacer en Dublín, la capital de Irlanda, famosa por la cerveza Guinness, los pubs y la música en directo.
Índice de contenidos
Hazte una foto con Molly Malone
La famosa vendedora de mariscos es probablemente el personaje más querido de Irlanda, aunque no se sabe a ciencia cierta si de verdad existió o no. Se dice que era pescadera de día y prostituta de noche, y murió por unas fiebres (muy probablemente a causa de esto último). Su estatua puede verse en Suffolk Street.
Tómate un Irish Breakfast
¿Dónde tomar un desayuno típico irlandés? En la recepción del hostal nos recomendaron a mis amigos y a mi que nos acercasemos hasta el pub O'Neills, al ladito de la estatua de Molly Malone. Se trata de un pub irlandés con 300 años de historia y tienen una buena carta de desayunos (bastante contudentes todos ellos). Yo me tomé el Really Good Full Irish Breakfast, por 6.95€, que lleva huevo frito, dos salchichas, dos lonchas de bacon, champiñones y judías, entre otras cosas. Si quieres pasar a tomarte una pinta por la tarde, también tienen música irlandesa en directo (aunque no ví ningún concierto aquí).
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Visita el Trinity College
Muy cerca del O'Neills se encuentra el Trinity College, la Universidad más antigua de Irlanda. Su biblioteca merece una visita por sus más de 4 millones de libros y por acoger el Libro de Kells, un antiguo manuscrito ilustrado realizado en el pueblo de Kells por monjes celtas. He de decir que aunque es una de las cosas obligadas que hacer en Dublín, la visita merece la pena, el precio de entrada es demasiado elevado (13 euros).
Pasea por sus calles
A unos pasos del Trinity College se encuentra el parque St. Stephen's Green, un pequeño parque público en medio de la ciudad con lagos donde hacer una pausa entre visita y visita. Para llegar hasta aquí puedes caminar por Grafton Street, la calle comercial más concurrida de Dublín.
Tómate una pinta barata en Dicey's
Se trata de un club que ofrece pintas de cerveza a 2€ (¡y hamburguesas también!). Cuando me comentaron que las cervezas solamente costaban 2€ (la media de la pinta en Dublín son unos 5-6€), pensé que el lugar sería un bar cutre. Resulta que me equivoqué totalmente, ya que Dicey's es una cuidada discoteca con jardín, bastante grande y llena de gente sea el día que sea. Una buena opción para salir de fiesta en plan barato.
Observa los contrastes del castillo de Dublín
Yendo hacia el barrio del Temple Bar se encuentra el castillo de Dublín. Del castillo destacan su Capilla Real y el contraste entre las diferentes extensiones del edificio (desde la época medieval hasta las construcciones más recientes con fachadas de colores que bien podrían ser las oficinas de Google…).
Disfruta de la música irlandesa en directo en el barrio del Temple Bar
Temple Bar es un famoso pub dublinés (probablemente el más conocido de la ciudad), pero también es el nombre del barrio en el que se encuentra, repleto de pubs, restaurantes y fachadas llamativas. No puedes dejar de visitar todos estos pubs, tomarte una pinta en ellos y disfrutar de las actuaciones de live music que ofrecen (gratis).
Visita la Guinness Storehouse
La fábrica de la cerveza Guinness se encuentra no muy lejos del centro de Dublín y puedes llegar dando un paseo. Lo que puede visitarse es un amplio museo de varias plantas en el que conocer la historia de esta cerveza y cómo servir una Guinness. Como ya indiqué en mi post anterior, Impresiones de Dublín, la visita no me convenció porque la visita se hace de forma individual, sin un guía que explique el proceso de elaboración y te enseñe la verdadera fábrica. Puedes leer más en el post sobre mi visita a la Guinness Storehouse.
Escápate a Howth
Si Dublín se te queda pequeña y tienes tiempo de hacer una pequeña excursión, puedes tomar un tren y acercarte a Howth, un pequeño pueblo pesquero en la costa, cerquita de la capital. Si el día acompaña puedes visitar sus acantilados y ver las focas que se acercan hasta la costa.
Haz un free tour
Para conocer todos los secretos de la ciudad, ¡recórrela con un free tour! Si no sabes qué es un free tour, te explico. Los tours tradicionales suelen tener un precio fijo establecido y pagas de antemano. Con el free tour es distinto, ya que el guía primero hace el recorrido y, cuando acaba, tú decides cuánto dinero pagar por la actividad. De ahí que estos tours sean mucho más atractivos que los tradicionales, ya que el guía debe esforzarse por hacer un buen trabajo. Siempre que puedas hacer un free tour, ¡hazlo!