Tenemos mucha suerte de vivir en España, y es que cada rincón de nuestra geografía tiene algún lugar bonito que ver. Muchas veces solamente prestamos atención a los grandes destinos turísticos, pero en cuanto salimos un poco de ruta podemos encontrarnos con pueblos preciosos. En el post de hoy te propongo visitar Alarcón, uno de esos lugares increíbles que he tenido la oportunidad de conocer recientemente.
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Por qué visitar Alarcón
Visitar Alarcón es como viajar en el tiempo. Se trata de un pueblo con orígenes medievales y eso se deja ver aún en los restos de las fortificaciones de la época. Aunque existieron asentamientos antes, fue con los musulmanes cuando se construyó una primera fortaleza en el siglo VIII. El pueblo del nombre viene también de aquella época (como muchas de las palabras que empiezan por «al») y, de hecho, significa «La fortaleza».
Más tarde evolucionaría hasta el castillo que vemos hoy en día y se ampliarían las construcciones defensivas, de las que quedan restos en forma de torres en los alrededores del pueblo, como la Torre de Armas o la Torre de los Alarconcillos. Además, Alarcón cuenta con un buen número de iglesias y está declarado Conjunto Histórico-Artístico.
El pueblo se sitúa en un entorno privilegiado, sobre un risco en un meandro del río Júcar. No es de extrañar que se eligiera este lugar para construir una fortificación, y es que estando rodeado por el río, era casi inexpugnable. Tanto desde el pueblo como desde las torres de los alrededores hay muy buenas vistas de los cañones que ha ido erosionando el río, así que no puedes dejar de admirar también todo lo que rodea a este pueblo de postal.
Qué ver en Alarcón
Alarcón es muy pequeñito (cuenta con unos 150 habitantes), así que se puede recorrer tranquilamente en un ratito. ¿Qué hay que ver en Alarcón? ¡Toma nota!
Torre de Armas y su mirador
Antes de adentrarte en el pueblo, te recomiendo hacer una parada en el mejor mirador de Alarcón. Se trata del lugar donde se sitúa la Torre de Armas, la primera de las edificaciones defensivas que nos encontramos en los alrededores del pueblo. Desde allí hay unas vistas espectaculares de Alarcón, su castillo, el río Júcar y los restos de otras torres defensivas.
La Torre de Armas se encuentra en muy buen estado de conservación, aunque no se puede acceder al interior. También se le llama Torre del Campo, igual que la puerta de acceso al pueblo que va unida a ella y que vas a atravesar después teniendo otra imagen increíble del castillo.
Castillo de Alarcón
El origen de todo es el castillo, que con sus 13 siglos de historia sigue vigilando el río Júcar (aunque ahora lo hace mucho más tranquilo). Las dependencias en sí no se pueden visitar, y es que es un Parador. Sí podrás entrar al patio del castillo a tomarte algo, ya que allí está la terraza de la cafetería, pero si quieres ver algo más, entonces tendrás que quedarte a dormir.
Iglesias de Alarcón
Aunque el castillo se lleva casi todo el protagonismo de Alarcón, lo cierto es que sus iglesias también tienen su atractivo. En un pueblo tan pequeño encontramos 4 iglesias, lo que da cuenta de su importancia en el pasado: iglesia de Santa María, iglesia de la Santa Trinidad, iglesia de San Juan Bautista e iglesia de Santo Domingo de Silos. No puedes dejar de callejear para admirarlas por fuera, pero, si están abiertas, aprovecha y entra también a verlas. ¡Puedes llevarte alguna sorpresa!
Por ejemplo, la antigua iglesia de San Juan Bautista ha sido reconvertida a centro cultural en su interior alberga una de las obras de arte contemporáneo más espectaculares de España: las pinturas murales de Jesús Mateo. Cubren todas las paredes del templo, representando los orígenes de la vida, y el proyecto cuenta con el patrocinio nada más y nada menos de la UNESCO. Cuando lo visité estaba cerrado, pero aquí te dejo una imagen que seguro te animará a visitarlo:
Los versos de Don Juan Manuel
Otra cosa llamativa que podrás ver al visitar Alarcón es que sus calles están llenas de citas. Se trata de los versos de Don Juan Manuel, el autor de El Conde Lucanor, una de las obras narrativas más importantes de la Edad Media. El escritor vivió en el castillo de Alarcón, pues era Príncipe de Villena y en la época esta zona se encontraba bajo su señorío. Ahora bien, no terminó sus días aquí, sino que está enterrado bastante lejos, en la Capilla de los Manuel de Peñafiel, población de la que también era Señor.
Dónde queda y cómo llegar a Alarcón
Alarcón es un pueblo de la provincia de Cuenca situado en el sur de la misma. Llegar hasta allí es bastante fácil en coche (haz clic aquí si necesitas alquilar uno), pues se encuentra muy cerca de dos vías de comunicación importantes: la autovía A3 y la carretera N-III, que conectan Madrid con Valencia. Viajando desde Madrid habría que tomar la salida de la A3 en Honrubia para seguir por la N-III hasta el desvío. Mientras, si se viaja desde Valencia, Albacete o Cuenca habría que pasar por Motilla del Palancar. Yo lo visité desde Villalgordo del Júcar, ya que estaba pasando un fin de semana allí con amigos.
Te recomiendo mucho visitar Alarcón. Aunque sea un pueblo pequeño, tiene mucho encanto y está enclavado en un entorno espectacular. Salirse de ruta nos puede traer muy buenas sorpresas y Alarcón es la prueba de ello.