Existen sitios ocultos para el turista y que no tienen nada de secreto para el residente. No están escondidos, es más, pueden estar en grandes espacios públicos, así que date prisa si quieres conocerlos antes de que se hagan más populares. Los secretos no permanecen ocultos por mucho tiempo.
Vayamos por partes. Para poder viajar es conveniente que conozcas los requisitos para tramitar la visa de Estados Unidos, dependiendo, entre otras cosas, de si tu estancia es inferior a 90 días. Ya tenemos el plan de vuelo, las reservas de alojamiento, las maletas y… ¡nos vamos a Nueva York!
En Nueva York se aglutina todo, existe de todo y es capaz de complacer a todos. Todo es posible y tiene listas de ranking para todo. Aquí encontrarás recomendaciones de lugares menos frecuentados y que debes ver:
1.- Busca otras ciudades del mundo. Sí, puedes encontrar un rincón de la Irlanda rural en Iris Hunger, pero te sorprenderá ver la recreación de un jardín chino en State Island, o Pomander Walk, donde 8 casas de estilo Tudor brotan, fuera de lugar, en el corazón de Manhattan. Encontrarás vestigios de Pompeya o un Obelisco de Egipto, o más recientes como restos del muro de Berlín.
2.- Visita sus Museos, los hay para casi todo lo imaginable. Pero visita también los murales de Graffiti en Brooklyn, arte urbano en un museo al aire libre. Conoce la obra de artistas en galerías alternativas, descubre la peluquería de los famosos, el club de los exploradores, donde se recopilan objetos de viajes alrededor del mundo, o las tiendas de juguetes, que son verdaderos museos.
3.- Come sus clásicas hamburguesas y donuts o un brunch en Rosemary, pero vuelve al ambiente de los años 20 en un bar clandestino detrás de una puerta invisible -Bathtub Gin- o siguiendo a la salchicha gigante – Crif Dogs –. Descubre un restaurante donde se come a oscuras, uno con recreación NINJA, un japonés con ambiente Zen – Hi Collar -o el museo del Helado, que incluye una piscina dulce y una sala de chocolate.
4.- Pasea por sus calles, puede que te señalen un refugio nuclear como el de la Base del puente de Brooklyn. Pasea, y cuando te creas aprendida su cuadrícula, encuentra la avenida 6 y medio que te acortará el camino. También son un atajo los túneles como el de MCGraw Hill, un túnel de vidrio con una cascada que une las calles 48 y 49.
5.- Acude a un espectáculo teatral en Broadway, pero no dejes de asistir a algún evento deportivo, por ejemplo, en el estadio de los Yankees, una de las experiencias que vale la pena vivir.
6.- Ve de compras por sus enormes centros comerciales y también pásate por uno de los ambientados mercadillos callejeros como el de Bushwick Flea Market. También los hay nocturnos.
7.- Empápate de Góspel en una iglesia en Harlem, conoce las sinagogas de Brooklyn o Limelight, una curiosa iglesia reconvertida a otros usos.
8.- Sorpréndete con la arquitectura de una falsa casa en Brooklyn Heights y del más novedoso barrio con edificios de renombrados arquitectos en Hudson Yard. El edificio The Vessel es su seña de identidad por el momento. Admira las vistas desde lo alto de uno de sus rascacielos o desde el Mirador Granty Plaza State Park, otro lugar que no te debes saltar.
9.- Naturaleza. La encuentras sin buscar en Central Park, pero busca también las cascadas en Greenacre, Paley y los remansos de paz y jardines en el barrio de Nolita. En medio del ajetreo de Wall Street, un paréntesis en verde, nos lo da el Ford Foundation Building.
10.- Disfruta del amanecer de Nueva York desde el marco del Empty Sky Memorial, cargado de simbolismo.
Éstas son algunas propuestas que, casi sin salir de las rutas clásicas, muy cerca de lo imprescindible que visitar, nos enseñan otra cara de la ciudad que quizás te guste descubrir.